PODEMOS Y EL 26J

Podemos aún no entiende el resultado 26J. Compara las encuestas de intención de voto y los resultados, sin salir de su asombro. Y es que en pocos meses han pasado de tocar el cielo, a conducir la ideología de izquierda a la oposición durante un tiempo. En política las ambiciones personales se pagan. Pablo Iglesias  desde el despacho de la Universidad se imaginó que disfrazado de socialdemócrata, abrazando a comunistas y con campañas propagandísticas quiso representar una opción seria a la presidencia. Cinco millones de votos y 71 diputados son cifras a respetar, pero no suficientes para construir otro mundo político paralelo. Es posible que tenga dificultades para mantener su liderazgo, e incluso que pueda evitar la fragmentación de su proyecto. A pesar de que Echenique pase del amor a a extirpar malas hierbas.