El Lugo cerró el año con derrota y malas sensaciones en uno de los peores partidos de la era Nafti, aunque a decir verdad no empaña la buena campaña realizada hasta el momento.
Ayer, el Lugo volvió a mostrar sus miserias en La Romareda. Los rojiblancos acudían a la cita con la moral por las nubes y con la idea de conseguir algo positivo ante un Zaragoza necesitado y asolado por las dudas al que solo le valía la victoria.
De entrada sorprendió la ausencia de Djaló, por lo que es de suponer que es otro más que pasa a formar parte de esa lista de lesionados que jornada tras jornada se mantiene en nivel alto.
El Lugo de La Romareda recordó al de Sto. Domingo con los mismos errores. Gol encajado en salida de balón, falto de ambición, de remate y nula propuesta con balón.
A pesar de de los altibajos de las últimas jornadas, y gracias a los puntos sumados en otros encuentros donde el equipo se mostró a un nivel competitivo alto se encuentra instalado con cierto margen sobre la zona roja de la clasificación.
Ahora vienen días de descanso en el mejor momento y recuperar a toda la tropa es de vital importancia para que el equipo vuelva a transmitir buenas sensaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario