El Engaño Wolkswagen es una prueba más de como actúan a veces las grandes empresas. Intentan convencernos de su preocupación por la ecología, pero esto es pura estrategia de marketing, todo vale para vender más.
El asunto posiblemente afecte al prestigio de la marca que lleva 80 años fabricando automóviles fiables y de calidad. La culpa no es de los cientos de miles de trabajadores, que hacen su trabajo, sino de unos cuantos directivos irresponsables y tramposos que lo único que buscan son beneficios a costa del sufrido consumidor.
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