El próximo domingo concluye el campeonato de Liga en Segunda División. El Lugo cumplió el objetivo de mantener la categoría. Pero no solo concluye una Liga para la entidad rojiblanca, finaliza una etapa. Cambiará el Consejo de Administración, el cuerpo técnico y gran parte de la plantilla.
Se iniciará la época de Tino Saqués como máximo mandatario y también propietario. Termino éste novedoso en la entidad rojiblanca, pero habitual debido al marco legal existente y al imperio de la ley, de mercado en este caso.
Con dos ascensos por dilucidar y una polémica abierta en Primera entre el Elche y el Eíbar por razones económicas, la temporada 2015-16 será diferente a las anteriores por dos razones. Una, si entra en vigor el nuevo reparto de derechos televisivos en caso de que se firme, los clubes recibirán en torno a 5 millones de euros con lo que duplicarían sus actuales ingresos; el límite salarial se elevaría, los presupuestos engordarían y los clubes podrían acceder a un mercado más amplio de futbolistas.
En caso de que el nuevo convenio televisivo no entre en vigor hasta la temporada 2016-17, la lucha por la permanencia en la categoría será cruenta y todos los clubes irán a degüello. Ningún equipo querrá bajar para lograr la “bicoca” económica del futuro contrato televisivo. Por todo ello la próxima temporada tiene tintes distintos y su realidad será bien diferente a las anteriores y a la presente.
Por Emilio González
Todavía será más diferente para el CD Lugo. Con casi todo “nuevo” _Consejo, plantilla, cuerpo técnico_, el Lugo deberá adaptarse rápido, aprender deprisa y rendir desde el primer momento en todas las facetas, tanto deportiva como económica y social. Los clubes modestos, y el Lugo es un claro ejemplo, no puede dar ningún tipo de ventaja a sus adversarios en la lucha por sobrevivir en el fútbol profesional.
El próximo lunes. Esa es la fecha marcada en rojo en el calendario de los accionistas, socios y aficionados rojiblancos. El partido de Montilivi tiene una importancia relativa, pero es el próximo lunes la fecha señalada por Tino Saqués, nuevo propietario del equipo, para dar a conocer su proyecto. Hasta ahora, el empresario lucense asumió la responsabilidad y fue objetivo y víctima de todo tipo de ataques. Desde el lunes, se pondrá cara a su equipo, directivo y técnico. La situación cambiará y tomará cuerpo de forma definitiva a la conclusión de la junta general extraordinaria de accionistas del próximo 10 de junio.
Muchas incógnitas por despejar. Deportivas, económicas y estructurales. Los socios, accionistas y aficionados rojiblancos desean saber todo de todas ellas. La gestión y el trabajo del equipo de Tino Saqués, como el propio empresario lucense reconoció, ya ha empezado. Pero queda una faceta clave y primordial; “conocer” como está el club por dentro y en la Liga de Fútbol Profesional; sin todo ello, el conocimiento y la situación del nuevo equipo con respecto a la entidad y a su entorno , sería incompleta.
A nive deportivo queda casi todo por conocer. Confirmar los nombres de Luis Milla como técnico, Toni Otero como director deportivo o Luis Cembranos como segundo entrenador. Y a partir de aquí, multitud de preguntas ¿Habrá filial?, ¿Qué importancia se concederá a la base?, ¿Quién la dirigirá?, ¿Habrá convenio de colaboración, fusión, absorción o vinculación con otros equipos?, ¿Cuántos jugadores del primer equipo quiere o intentará renovar el futuro cuerpo técnico?, De los actuales jugadores con contrato en vigor ¿continuarán todos o se les buscará salida si alguno no entra dentro del futuro proyecto?. ¿Habrá gerente, mando unificado o dirección colegiada por compartimentos estancos?. Multitud de incógnitas que comenzarán a despejarse desde el próximo lunes.
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