viernes, 31 de julio de 2015

LA CACERÍA INDIGNANTE

El debate sobre el respeto a la vida animal y un indignado clamor contra la frivolidad de unos cazadores que pagan grandes cantidades de dinero para presumir de su arte, el arte de matar, saltaron de inmediato a los medios y a las redes sociales. La legítima denuncia de un acto intolerable, liquidar a un animal pr
otegido derivaron en una explosión de amenazas contra la clínica del dentista "cazador".
No hay un acuerdo entre las asociaciones como tratar la caza mayor. La batalla es dura, días antes de la muerte del león Cecil, 23 elefantes bebés fueron capturados en el mismo parque de Hwange y exportados a China, pues tiene que ver con el marfil, que alientan mercados millonarios relacionados con la corrupción.
La muerte de Cecil puede servir como acicate para revisar las leyes de los países afectados y valorar si los medios para combatir un mal tan extendido son suficientes. Algunos pasos de las autoridades de Hwange apuntan en buena dirección, dos de los implicados ya están bajo la jurisdicción de un tribunal, y estudian como proceder legalmente contra el dentista "cazador" estadounidense.

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