Ya se ha celebrado el congreso del PSOE. Todo ha ido según las previsiones, reconocimiento y emoción en la despedida de Rubalcaba, cierre de filas con el nuevo líder, manifestación de intenciones, renovación de la ejecutiva, discrepancias previsibles, todo muy bonito y muy bien servido. ¿Y ahora qué?. Está claro que la labor de recuperación todavía no ha comenzado, pero es necesario e imprescindible llegar a la ciudadanía . Deben demostrar a los ciudadanos que conocen los problemas que tienen en todos los ámbitos, medidas concretas para solucionarlos y no mentir ni tratar de engañar al personal.
El Congreso ha sido muy "lindo", banderas, aplausos, discursos y sonrisas. Pero lo importante es lo que ha quedado pendiente. Llegó la hora de la verdad. Ahí se verá si el nuevo equipo da la talla.
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