Al Lugo la ausencia de talento le lastra por una idea futbolística que requiere estar bien engrasado para no penalizar. Ante el Alavés fue cuesta arriba desde bien pronto por un error en la salida de balón. Mandiá cambió la actitud del equipo vitoriano, demasiado contemplativo en el estreno del técnico en Riazor y sus jugadores apretaron cerca de su meta al Lugo, del que no cabe aguardar un cambio de libreto ni en las buenas ni ahora en las malas. Al Lugo le pueden dañar como lo hizo el Dépor en la primera parte del derbi, aguardando atrás a la espera del error y la contra, o subiendo líneas para incomodarle en la construcción como sucedió en Mendizorrroza. El Lugo arriesga y pena demasiado por sus errores, que incluyen la defensa de las acciones a balón parado. Y necesita producir mucho en ataque para marcar porque, además, ahora sí, ya empieza a necesitar el regreso de Rennella.
Tras sumar un punto de los últimos 12 en disputa, el Lugo sigue cerca de la cabeza, pero transita sólo a 5 puntos del antepenúltimo, el Hércules, que además es su próximo visitante.
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