martes, 7 de octubre de 2014
LA MANTA, EL ÁRBOL Y LAS RAMAS
Cuando en el ámbito cotidiano a alguien se le acusa de haber hecho algo incorrecto, uno de los recursos que utiliza dicho alguien para cortar a su interlocutor es el de amenazar con "tirar de la manta", sugiriendo que dispone de información que podría perjudicar a alguno de los presentes. Es una artimaña verbal que, en principio, no tiene trascendencia, aunque utilizada en foros relevantes conlleva enfangar lo público y cierta desvergüenza por quien amaga con decir. Un ejemplo reciente de esta práctica es la del expresidente Pujol que, en sede parlamentaria y cuando se investiga su anómalo proceder, nos sale con aquello del árbol y las ramas, dejando entrever lo bueno que es por lo mucho que sabe, y no dice de otros, que han actuado de igual o peor manera que la suya.
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