jueves, 16 de mayo de 2013

FUGA DE CEREBROS

Cuando se habla de fuga de cerebros es inevitable imaginarse gente con talento huyendo hacia otros lugares donde sepan aprovechar su trabajo. El caso del físico gallego Diego Martínez Santos rechazado en España mientras recibía el premio al mejor físico joven del Continente.
En España hay poco dinero para la ciencia. Los presupuestos se recortan año tras año y los contratos se reducen. De ahí que haya tantos científicos que busquen acomodo fuera de España para poder seguir su labor y lograr un cierta estabilidad. Aun así, son muchos lo que se aventuran a intentar regresar y lo hacen a través del programa estrella, el Ramón y Cajal, instaurado en 2011 para incorporar científicos de alto nivel, para recuperar cerebros.
Hoy, la penuria es tan que mientras al principio se convocaban hasta 800 plazas cada año, en 2012 no hubo convocatoria y se dejó para este año la selección de solo 175 candidatos.
Martínez Santos creyó que una de las 175 plazas tendría que ser para él, dado su currículo. Tres años en el Laboratorio Europeo de Física en Ginebra, ahora en el Instituto similar, el Nikhef, en Holanda, y la nominación a ese premio que finalmente fue suyo eran las mejores credenciales.
La comisión que evalúa a los candidatos ha dictaminado, sin embargo que Martínez Santos carece de "liderazgo internacional", lo que ha dejado perplejo al candidato y ha puesto en evidencia al criterio de la comisión.
Diego Martínez Santos dice que intentará una plaza en otra ocasión. Un buen amigo le diría que su rechazo es solo el principio de las frustraciones que le esperan sin lo consigue.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
;