EL "SOBRECOSTE"

La palabra sobrecoste tendría que ser candidata al vocabulario del año. El sobrecoste que está tanto de moda, esa desviación presupuestaria al alza en los grandes proyectos constructivos que lleva a cabo la administración. El sobrecoste sería el tributo que los ciudadanos hemos de pagar a la faraónica y al ansia de enriquecimiento fácil de los políticos. Se trata de empezar a construir algo, no importa qué ni para qué, tramos de alta velocidad, túneles en autopistas, líneas de tranvías y metro, megaciudades estrella, terminales de aeropuerto y hasta aeropuertos fantasmas. Como alguien dijo "hacer un agujero tan grande que ya no haya otro remedio más que traer el dinero necesario para taparlo". Los agujeros de la construcción son solo una metáfora. Se trata de hacer un agujero en las arcas  públicas para tapar los agujeros de los bolsillos de algunos políticos. Quizá no sería malo imponer a los políticos un voto de pobreza. Que no tuvieran más salario que las dietas por vivienda y manutención. Eso sería un buen ejemplo para un pueblo cada vez más empobrecido.