PENSANDO EN ROJIBLANCO

Un Lugo que lucha desde la humildad por mantenerse en la categoría y que ahora mira hacía arriba, mereció la victoria en Pucela porque hizo más cosas que su rival para ganar.
Un minuto maldito. Un penalti riguroso. Ese fue el castigo que sufrió el Lugo en el Zorrilla. Cuando la recompensa de los tres puntos hubiera dado más vida al sueño del playoff. Dos puntos que privan a los rojiblancos de colocarse al "rebufo" de los privilegiados

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El Lugo sufrió un código futbolístico "Cuando perdonas, al final lo terminas pagando". Demasiado castigo. Un punto que sabe a poco en estos momentos, cuando los tres ya estaban en la "bodega" del autobús.
De momento, quedan 18 puntos en disputa y al día de hoy, quizá con 64 o 65 sean suficientes para llegar al objetivo. La licencia aún esta activa. Así que a seguir peleando, todo es posible.
!!Forza Lugo!!