sábado, 26 de octubre de 2013

ESTE CINE NO ESTA MUERTO

Que haya una afluencia masiva a las salas de cine y colas kilométricas como antaño es hoy noticia. De las buenas. Que esa afluencia se registre sólo dos semanas después de que el ministro de hacienda Cristóbal Montoro culpara de las crisis del sector a la baja calidad de las películas españolas es una ocasión para sacarse la dolorosa espina que tuvieron que encajar los profesionales de la industria.
Durante tres días, por quinto año consecutivo los productores, exhibidores y distribuidores se unieron para hacer una espectacular oferta, una entrada de solo 2,90 euros con derecho a ver cualquier película en una de las 3.000 pantallas adheridas a estra fiesta del cine. Frente a los vacíos habituales y al precio de una entrada que puede subir hasta los 11 euros, cientos de miles de españoles han hecho colar par ver cine.
Todo apunta que dar facilidades al consumidor para que se inscriba a través de internet es una fórmula barata y sencilla y que el ministro tuvo una buena oportunidad para callarse. Porque es verdad que una de las películas más demandadas ha sido la americana Gravity, pero también que dos de las más exitosas han sido españolas, Las brujas de Zugarramurdi y La gran familia española.
Pero lo esencial de este éxito es que se constata que a la gente le gusta ir al cine y que el precio influye. De ahí que haya puesto otra vez sobre la mesa el debate sobre el IVA del 21%, aunque no sea el único factor de la crisis de asistencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
;