La irrupción de Podemos ha sido, sin duda, un revulsivo eficaz y ciertamente necesario para que los dos partidos hasta ahora mayoritarios, se dieran cuenta de que tenían que cambiar, salir de su aislamiento social, acercarse al ciudadano de a pie y luchar, de una vez por todas, contra la insoportable corrupción. Además, Podemos ha traído cierta frescura, juventud a nuestro anquilosado mapa político.
Pero deberían haber sido conscientes de que cuando se ganan votos y popularidad a base de dar clases sobre honestidad, democracia y buen hacer, has de tener muy limpia tu casa, tu historia personal y tu pasado. Ser honesto debe ser una actitud vital, no solo un tema que se enseña en las aulas y por extensión se proclama en un mitin. Desconozco la verdad sobre los señores Errejón y Monedero, de la poderosa maquinaria política y mediática que se está moviendo en su contra, pero la realidad es que para ser jóvenes, cualificados y recién llegados a la política no nos están dando un ejemplo muy gratificante de lo que ellos mismos critican.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario