LA LIGA DEL EXODO

Acuciados por las deudas, los rivales de Madrid y Barça venden a sus estrellas y encaran con fichajes de saldo la Liga más desigual. La presión de los clubes extranjeros llega a los juveniles..
La sentencia radiografía una Liga que comienza marcada por la abismal diferencia económica entre los dos grandes y el resto. La distancia se ve reflejada en las plantillas con las que compiten uno y otro, y queda agrandada por una explosión exportadora que ha llevado ya a que haya cerca de 300 futbolistas españoles jugando en el extranjero. Este año, solo en primera, 33 españoles han dejado el país. Una cifra récord.
Ahogados por una deuda de 4.100 millones de euros, con una veintena de clubes de primera y segunda controlados por administradores concursales y con hacienda en la nuca, el fútbol español se ha a visto a hacer caja. Esta política ha propiciado, por segundo año consecutivo, el salto de la exportación de futbolistas de clubes de primera sea positivo de 200 millones si se descontaran los 50 que han gastado Madrid y Barça, que juegan su propia Liga. El Madrid ha fichado por 38 millones a Illarramendi que salvo lesiones o sorpresa, no será uno de los mediocentros titulares del equipo. La cifra pagada por un suplente tríplica el presupuesto del Rayo Vallecano. Para cubrir su puesto, la Real Sociedad, club de origen de Illarramendi, no ha gastado ni un euro. Ha traído cedido a Granero desde el Queens  Park Rangers.
Hace años parecía imposible meter en cintura al fútbol, pero se está consiguiendo y ya se ve reflejado en el descenso de la deuda con hacienda, que en un año ha bajado de 750 a 670 millones de euros.
Madrid y Barça se salvan porque copan el 56% de los 1000 millones de ingresos totales de la Liga. En derechos televisivos por la Liga estos dos equipos suman el 37% del total. Cobran cerca de 140 millones al año. mientras que los modestos ingresan en 12 y 18. El resto de ligas europeas tiene un reparto más equilibrado.
La crisis ha terminado por llegar al fútbol y de que manera. La suerte para el sector es que el bache ha coincidido con el mejor momento de la selección. El resultado es que estrellas, secundarios jóvenes talentos, veteranos, entrenadores, preparadores físicos, fisios... todo lo que huele a fútbol español, se cotiza en un mercado creciente.