Este fin de semana se ha puesto de moda comer plátanos. El pasado domingo, en el estadio El Madrigal de Villarreal, un espectador le lanzó un plátano al futbolista brasileño del Barça Dani Alves, quizás con la idea de ofenderle. El futbolista respondió de forma espontánea abriendo el plátano y le dio un mordisco.
Su gesto ha dado lugar a la creación de una campaña bajo el lema" Todos somos monos", a la que se han sumado numerosos deportistas subiendo fotos a las redes sociales en las que comiendo un plátano dicen "no al racismo".
Dani Alves, con su simpática forma de actuar, ha conseguido que rechacemos los actos de tipo racista. Ojalá esto no se limite solo al fútbol y al racismo, sino que se extienda a las distintas situaciones violentas que ocurren día a día.
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